Ciudad de México.- Tras casi trece años de servicio en El Salto, el obispo franciscano Juan María Huerta Muro, ha sido nombrado por el Papa como Segundo Obispo de Xochimilco, la joven diócesis ubicada en la capital de la República creada en 2019.
Huerta Muro, de 62 años, es originario de Guadalajara, Jalisco; sin embargo, su ejercicio pastoral como miembro de la Orden de Frailes Menores (franciscanos) lo desempeñó especialmente en Tijuana, Baja California. Ahí fue promovido en 2012 al orden episcopal por el papa Benedicto XVI como obispo prelado para el territorio de misión en la Sierra Madre Occidental, en El Salto, Pueblo Nuevo, Durango.
El obispo franciscano sucederá al obispo Andrés Vargas Peña, de 78 años, quien desde 2010 ha pastoreado la segión sureste de la Ciudad de México, primero como obispo auxiliar del cardenal arzobispo Norberto Rivera Carrera; y después como Primer Obispo de Xochimilco, con la creación de este territorio pastoral en 2019.
La Diócesis de Xochimilco abarca el territorio de alcaldía del mismo nombre en la Ciudad de México más los territorios de Tláhuac y Milpa Alta. Ubicada en el extremo sur y sureste de la capital mexicana, la diócesis está conformada aún por grandes regiones rurales, montañosas y lacustres.
Gracias a la tradición que los Doce Apóstoles Franciscanos (los primeros evangelizadores misioneros en la Nueva España), los pueblos originarios de la diócesis conservan los templos edificados en los albores del siglo XVI así como la religiosidad, fiestas y elementos de devoción popular centenarios. Por ejemplo, la intensa devoción al Niñopa (Niño Dios) y las mayordomías que se congregan entorno al Exconvento y monasterio franciscano de San Bernardino de Siena, hoy catedral diocesana.
De este modo, aunque llega a una de las diócesis más jóvenes de México, Huerta Muro tomará el testigo de una larga historia evangelizadora en el país, una trayectoria que alcanza a fray Martín de Valencia, pastor y verdadero prelado de los primeros frailes que, bajo mandato canónico, fueron los forjadores de una espiritualidad misionera en el Nuevo Mundo.