Ciudad de México.- En el marco del Año Jubilar de la Esperanza, el Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II para Matrimonio y Familia (ITJPII) presentó este miércoles el libro “El lenguaje del cuerpo en el matrimonio”, del sacerdote y teólogo mexicano José Luis Íñiguez García. El acto, celebrado en el Auditorio Joseph Ratzinger de la Universidad Anáhuac México, reunió a estudiantes, académicos y agentes de pastoral familiar bajo el lema “Somos familia, esperanza viva”.
Una respuesta a una crisis formativa
El libro surge de una preocupación existencial del autor: la percepción de que muchas parejas contraen matrimonio sin una comprensión profunda de su significado teológico y humano. “Muchos entran al matrimonio sin quitarse las sandalias”, afirmó Íñiguez durante la presentación, citando el pasaje bíblico del Éxodo (3,5) para subrayar la necesidad de reconocer el vínculo conyugal como un “espacio sagrado”.
Basado en la Teología del Cuerpo de San Juan Pablo II —definida por el autor como una “reflexión sistemática sobre el amor”—, el texto busca trasladar conceptos teológicos al plano afectivo. “El matrimonio no es un campo de batalla, sino de encuentro”, insistió Íñiguez, destacando que el abrazo conyugal simboliza un “orden nuevo” elevado por la gracia divina.
Claves del libro: soledad, unidad y desnudez
Durante su exposición, el sacerdote retomó las tres experiencias originarias descritas por Juan Pablo II:
- Soledad: La conciencia de la propia identidad ante Dios.
- Unidad: La complementariedad entre hombre y mujer.
- Desnudez: La vulnerabilidad como expresión de confianza y amor
Estos elementos, según Íñiguez, actúan como un “lenguaje del cuerpo” que revela la “huella de Dios” en la relación humana. El autor profundizó en gestos concretos como la mirada, la palabra y la caricia, comparándolos con la contemplación de Adán al ver a Eva: “Son signos que actualizan el asombro ante el don del otro”.
Recepción y relevancia pastoral
La presentación concluyó con una sesión de preguntas y una firma de libros y se refiere que algunos asistentes resaltaron la “accesibilidad” del texto para abordar desafíos contemporáneos y es que, en la actualidad, muchos jóvenes buscan respuestas sobre el sentido sacramental del matrimonio en un mundo que suele reducirlo a un mero contrato.
El evento reforzó el rol del Instituto Juan Pablo II —creado en 1981 para profundizar en la enseñanza católica sobre familia— en un contexto global donde, según datos del Vaticano, el 60% de los matrimonios religiosos en Occidente no reciben formación previa específica.