Ciudad de México.- En una inusual y precavida ceremonia en la Basílica de Guadalupe en medio de la emergencia sanitaria por el coronavirus COVID-19, el arzobispo cardenal de México, Carlos Aguiar Retes, presidió las ordenaciones episcopales de Luis Manuel Pérez Raygoza, Héctor Mario Pérez Villarreal y Francisco Daniel Rivera Sánchez MSpS.
La ceremonia se realizó según los cánones litúrgicos para consagrar a los tres sacerdotes y revestirlos de las insignias episcopales. Fueron co-consagrantes el nuncio apostólico en México, Franco Coppola, y el arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López. A la ceremonia asistió un número reducido de obispos, sacerdotes y fieles. Se restringió el acceso a la feligresía a la nave del Santuario de Guadalupe y se pidió a los asistentes sentarse a un metro de distancia entre ellos.
En medio de medidas especiales por la emergencia sanitaria, se llevó a cabo la Consagración Episcopal de los tres Obispos auxiliares para la @ArquidiocesisMx
— Pastoral Siglo XXI (@PastoralSiglo21) March 19, 2020
Mons. Luis Manuel Pérez, Mons. Francisco Daniel Rivera y Mons. Héctor Mario Pérez,quien perteneció al clero de @arquimty pic.twitter.com/EEb90br1LR
En su homilía, el arzobispo Aguiar tomó como la figura de san José como modelo para los nuevos obispos auxiliares que se integran a su equipo inmediato de colaboradores: “José vivió la virtud de la humildad… vivió con plena fe y confianza en la Palabra de Dios, asumida con eficiente y puntual obediencia… cumplió su misión con una vida discreta pero eficaz”.
“Hoy con el mandato del Santo Padre Francisco que acabamos de escuchar, ordenaremos a tres nuevos obispos, que tendrán en san José un modelo de vida para cumplir la responsabilidad de integrarse al colegio apostólico”.
El cardenal recordó a los obispos que “la humidad logra convertirnos en auténticos servidores” y por ello les pidió que para afrontar las distintas circunstancias y ambientes socio-culturales será preciso actuar con responsabilidad, discreta y eficaz: “Es decir, sin protagonismos ni buscando reconocimientos y alabanzas, sino afrontando con valentía adversidades y conflictos”.
Al finalizar su mensaje, el cardenal pidió a los presentes suplicar a la Virgen María por todos los afectados por la pandemia del COVID-19 “y por todos los demás ciudadanos para que solidariamente asumamos las medidas preventivas con generosidad y gran responsabilidad”.
En la ceremonia también estuvieron presente, sin concelebrar, el arzobispo emérito de México, cardenal Norberto Rivera Carrera; al igual que seminaristas, consagradas e invitados especiales de los nuevos obispos.
Al finalizar, el cardenal Aguiar divulgó en un comunicado las labores en las que se involucrarán sus nuevos colaboradores en la Arquidiócesis de México así como los ajustes a los servicios que ya desempeñaban sus obispos auxiliares Salvador González Morales y Carlos Enrique Samaniego: “Luis Manuel Pérez Raygoza, apoyará en la Vicaría de Pastoral; Héctor Mario Pérez, en la Vicaría de Laicos; Francisco Daniel Rivera a la Vicaría del Clero; Carlos Enrique Samaniego López continuará en la atención a la Vida Consagrada; y Salvador González Morales seguirá desempeñándose como delegado en la Catedral Metropolitana y moderador de la Curia, asumiendo la función de vicario general que hasta el día de hoy ha venido desempeñando Enrique Glennie Graue”.
COMUNICADO-Arquidiócesis Primada de México-Áreas de atención de los obispos auxiliares