Ciudad Juárez, Chihuahua.- El obispo de Ciudad Juárez, José Guadalupe Torres Campos, denunció ante los medios de comunicación que diversos agentes sociales en la frontera cometen diversas violencias contra las personas en condición migratoria. Acusó que resultan preocupantes no sólo las deportaciones sumarias sino las actitudes de agresividad que se expresan contra las personas en tránsito.
Ante medios de comunicación locales, el obispo declaró que las deportaciones de migrantes tras el inicio de la administración trumpista "han llamado la atención" de las autoridades mexicanas y de la Iglesia católica; aseguró que ambas instancias abogan por una segunda oportunidad por parte del gobierno norteamericano para los migrantes que demuestren que son personas dedicadas al trabajo y honradas.
"Si, estamos siendo testigos de una acción muy violenta contra los migrantes tanto nacionales como de otros países... Cada día están siendo retornados muchos hermanos, es lamentable, ojalá que se les dé una oportunidad de volver", enfatizó Torres Campos.
El obispo apeló por el retorno del modelo fronterizo del CBP One, la plataforma de citas para migrantes que solicitan asilo y refugio en los Estados Unidos; pues, aseguró que la solicitud de asilo sin dicha herramienta se torna sumamente difícil: "Vemos que ya estaban allá, [ahora deben] volver arreglar sus papeles, darles una cita a los que están aquí y desean atención. Esperemos que se retome el programa CBP One de solicitud de asilo, para que tramiten sus papeles".
Interrogado sobre la acción de la Iglesia católica ante la crisis migratoria que algunas organizaciones prevén; el obispo recordó que las distintas instancias eclesiales "vamos a estar recibiendo grandes cantidades de hermanos repatriados, deportados. Nos estamos preparando en base a la experiencia, como ciudad como Iglesia".
Dijo que ha exhortado mediante comunicados a la sociedad civil, a los sacerdotes y a todos los fieles católicos "para que nos sumemos todos a acoger cada uno con sus posibilidades y atender a todos los hermanos que serán deportados", compartió.
La diócesis de Ciudad Juárez cuenta hasta el momento con tres espacios de acogida para migrantes: la Catedral, la Casa del Migrante y la Casa de Eudes en la que los grupos de migrantes pueden encontrar alimento, asesorías, medicamentos e incluso ropa, para poder hacer frente a sus necesidades.
"Les damos apoyo aquí en la Catedral, el alimento del lunes al viernes; en la Casa Eudes, es para mujeres acompañadas de sus hijos nada más y en la Casa del Migrante a todo tipo de personas", resaltó el obispo.
Aprovechó para agradecer la labor de asistencia humanitaria que otras denominaciones cristianas también hacen en la región fronteriza pues, advirtiendo el retorno masivo de migrantes, algunas de estas asociaciones se han instalado cerca de la frontera, en carpas enormes para también recibir a los deportados, dijo Torres Campos.
En un nuevo exhorto dirigido a autoridades y ciudadanía, el obispo pidió tener "un espíritu de acogida, de atención, de orientación, respetando siempre los derechos humanos de nuestros humanos migrantes".