Bucaramanga, Colombia.- "Inaudito", insisten la Iglesia y la policía colombiana en calificar el robo ocurrido en un histórico templo de área metropolitana de Bucaramanga el pasado fin de semana. El sacerdote José Fernando Díaz relató que un hombre burló la seguridad externa del recinto religioso para ingresar y robar más de 12 millones de pesos colombianos (casi 55 mil pesos mexicanos); el dinero estaba destinado al mantenimiento y administración pastoral de la parroquia.
"A las nueve de la mañana se desarrollaba la Eucaristía y mi sobrina estaba en el despacho, cuando un individuo vestido de pantalón blanco, chaleco negro, camisa de manga blanca y morral gris entró por la capilla por las cuerdas de pua y a la casa cural. [La casa] fue robada, un ladrón entró a Ruitoque Condominio", relató el religioso a la policía y los registros de videos de seguridad establecen que el delincuente aparece con la ropa descrita por el presbítero.
Según indicó el sacerdote José Fernando Díaz, mientras se estaba desarrollando el acto litúrgico el hombre ingresó y hurto un valor aproximado a los 12 millones de pesos, un hecho que lo alarma ya que este sería el dinero destinado para la manutención del próximo mes del lugar religioso y el capellán.
"El ladrón violentó una puerta de la casa cural... rompió una puerta, extrae la bolsa con la limosna. La capilla no tiene cosas externas, se sostiene con la limosna de la mía, no hay cuota de la comunidad. Yo pago los servicios. Fue la limosna de un mes. Luego se llevó mi cartera con mi cédula, mi tarjeta sacerdotal, las tarjetas de crédito", declaró.
Por el momento no se ha identificado al ladrón pero las autoridades adelantan las investigaciones pertinentes que permitan establecer el paradero del responsable de tan reprochado hurto en la capital santandereana.
En Bogotá se reportó otro robo a un religioso. Se trata de la catedral de la Arquidiócesis de Bogotá; sede del arzobispo primado de Colombia y un sitio histórico y turístico que recibe a millones de visitantes extranjeros y nacionales. Según las primeras versiones oficiales, los ladrones aprovecharon un momento de descuido de la seguridad del recinto para hurtar un valioso cáliz de la sacristía del templo.
Los casos de robo a recintos religiosos en Colombia ya ha alarmado a la Iglesia católica local, la cual recordó que en julio de 2021 también fueron sustraídas las joyas de la decoración del lienzo sagrado de la imagen de Nuestra Señora de Chiquinquirá, precisamente luego de un año del hurto y tras haberlas recuperado, se las volvieron a instalar al cuadro que los fieles lo consideran milagroso.
Ese mismo año, pero en marzo, a la sede de la Conferencia Episcopal de Colombia ingresó un grupo de delincuentes que, tras un elaborado plan, asaltaron el lugar y se llevaron varios objetos de valor y dinero.
Posteriormente la investigación del caso arrojo que la banda que cometió el asalto la conformaban algunos exempleados y hasta dos patrulleros de la policía. (Información Infobae)