Roma, Italia.- Desde Roma, el arzobispo de Monterrey y presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Rogelio Cabrera López, ha enviado un saludo a la grey regiomontana en el que comparte el encuentro sostenido con el papa Francisco y los compromisos adquiridos para, desde la Iglesia, enfrentar los grandes desafíos del cambio de época.
Junto a los mirmbros del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y en su calidad del titular de asuntos económicos del organismo continental, Cabrera ha sostenido encuentros con diferentes oficinas de la Curia Vaticana y con el propio pontífice: "Vinimos a ver al papa Francisco para informarle sobre los resultados de la Asamblea Eclesial que tuvimos en el mes de noviembre en la Ciudad de México; el mayor número de los participantes lo hicieron de modo virtual y un pequeño grupo estuvimos en Casa Lago en la Ciudad de México... le hemos narrado las cosas buenas que obtuvimos de esa asamblea, los límites, las esperanzas y también le planteamos lo que viene por delante; preparándonos al Sínodo de los Obispos que se celebrará en Roma en el año 2023".
Cabrera aprovechó para aportar un par de reflexiones más en su mensaje: "Sabemos que estamos viviendo un cambio de época muy importante, por lo que los cristianos debemos estar dispuestos a asumir con decisión nuestro compromiso en medio de la sociedad", dijo y destacó que los jóvenes de las comunidades eclesiales han tomado y deberán seguir haciéndolo "un protagonismo especial... [puesto] que ellos son valientes agentes de transformación".
El arzobispo recordó que la Iglesia neoleonesa ha buscado incentivar la participación activa de todos, especialmente de las mujeres y los jóvenes en los diversos ministerios laicales además en instancias de gobierno, discernimiento y decisión en la Iglesia; y recordó: "Decía el papa san Juan Pablo II: 'La juventud es la fuerza transformadora de la Iglesia y de la sociedad".
"Gracias a Dios, en nuestra Arquidiócesis, vamos avanzando en esta acción en particular al contar, desde hace tiempo, con un consejo diocesano de mujeres (laicas y consagradas) cuyas aportaciones son de gran valor para el fortalecimiento de todas las áreas de pastoral de nuestra Iglesia de Monterrey".
Como parte de esta promoción de las mujeres y de los jóvenes regiomontanos, el arzobispo comentó que se han dado "los primeros pasos en la creación de la Escuela de Ministerios Laicales, la cual se suma a las demás instancias de formación con las que contamos desde hace muchos años, teniendo ésta como principal objetivo el promover y formar a los laicos y laicas de nuestras comunidades parroquiales quienes, quienes por disposición conveniente y el apoyo de su párroco, puedan ejercer un ministerio, con nombramiento y envío de su servidor, en donde haya necesidad de hacer presente el Evangelio".
"Soy consciente de los desafíos que enfrentamos y que son diversos, unos más pesados que otros, pero que bajo la guía del Espíritu Santo, daremos respuesta ayudados por su gracia", reflexionó y exhortó: "Debemos hacer presente el Evangelio de Cristo, en todo momento y en todos los ambientes en donde realizamos nuestra vida, amando sinceramente, escuchando atentamente y sirviendo generosamente".