Tegucigalpa, Honduras.- El papa Francisco ha concretado varios cambios para la Iglesia de Honduras; la primordial noticia es la elevación a sede metropolitana arzobispal a la diócesis de San Pedro Sula con la designación del religioso franciscano de origen irlandés, Michael Lenihan; además el nombramiento de un nuevo arzobispo para el primado de Tegucigalpa que sucede al cardenal centroamericano más cercano al Papa, Óscar Rodríguez Maradiaga, quien ha acompañado a Francisco durante diez años en el consejo de cardenales C-9 del pontífice. Finalmente, el hasta ahora obispo auxiliar de Tegucigalpa, Teodoro Gómez, recibió la encomienda de gobernar y pastorear como obispo residencial a la diócesis Choluteca.
Este jueves, la Santa Sede anunció que el Papa aceptaba las renuncias del cardenal arzobispo de Tegucigalpa, Rodríguez Maradiaga, y el obispo de San Pedro Sula, el claretiano español, Ángel Garachana.
El cardenal salesiano Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga ha sido asesor de Francisco en asuntos latinoamericanos en el Consejo de Cardenales, el único de este origen. Fue presidente de Caritas Internationalis de 2007 a 2015.
Maradiaga fue nombrado arzobispo de Tegucigalpa en 1993, y deja su pastoreo 30 años después. Según las estadísticas eclesiales, a inicios de los 90 había 1,3 millones de habitantes en la diócesis, de los que un 92% eran católicos; en 2004 eran ya 2,1, de los que un 75% eran católicos, por el crecimiento de las congregaciones evangélicas y otros grupos protestantes.
En 2005 se desgajó parte del territorio para crear la diócesis de Yoro con 440 mil habitantes (hoy ya 650 mil). Y en 2017 se tomó otra parte para crear la de Danlí, con otros 450 mil habitantes.
Pese a la creación de esas dos diócesis en este siglo, la arquidiócesis que va a heredar el paúl español José Vicente Nácher sigue siendo de enorme población: 1.9 millones de habitantes, de los que son católicos siete de cada diez, con 130 sacerdotes y 60 parroquias.
Rodríguez Maradiaga, de 80 años, presentó su renuncia hace un lustro y el papa Francisco finalmente lo ha relevado en la capital hondureña con el nombramiento del misionero valenciano, José Vicente Nácher, superior de los religiosos vicentinos en Centroamérica.
José Vicente Nácher Tatay, el nuevo arzobispo de Tegucigalpa, es un religioso paúl o vicentino nacido en Valencia, España, en 1964. Se licenció en Sociología por la Universidad de Alicante y luego cursó estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Mayor de los paúles en Barcelona y en la Facultad de Teología de Cataluña. Emitió su Profesión Solemne en la Congregación de la Misión el 20 de enero de 1990 y fue ordenado sacerdote el 26 de octubre de 1991.
Fue párroco de San Vicente de Paúl en San Pedro Sula (2000-2005), párroco de San José en Puerto Lempira (2006-2016) y vicario episcopal de la Mosquitia en la diócesis de Trujillo: son tres zonas del norte del país pero distintas unas de otras. Desde enero de 2016, Nácher era el superior regional de los Padres Paúles de Honduras.
Por su parte, San Pedro Sula será erigida como sede arquidiocesana y recibirá a su primer arzobispo metropolitano en la figura de Michael Lenihan.
Lenihan nació el 22 de septiembre de 1951 en Abbeyfeale, Limerick, Irlanda. Comenzó su noviciado Franciscano en 1972 y estudió filosofía en la Universidad Nacional de Galway, Irlanda y teología en la Pontificia Universidad de San Tommaso D’Aquino y la Universidad Gregoriana en Roma, Italia. Realizó su profesión solemne en la Orden de Frailes Menores el 17 de Septiembre de 1977 y fue ordenado Sacerdote el 12 de Julio de 1980. Pertenecía a la Provincia Franciscana de los Frailes Menores de Centroamérica y Panamá, llamada Nuestra Señora de Guadalupe cuando fue nombrado el 30 de diciembre de 2011 por el Papa Benedicto XVI como primer obispo de la Diócesis de La Ceiba. Un dato curioso es que el obispo Lenihan llegó a la ciudad de La Ceiba el 4 de enero del 2012 acompañado por Ángel Garachana Pérez, entonces obispo de San Pedro Sula para anunciar oficialmente su nombramiento por parte del Vaticano; ahora Lenihan sucede al propio Garachana en la importante ciudad hondureña.
Finalmente, el Papa aceptó la renuncia por motivos de edad del obispo de Choluteca, Guy Charbonneau, originario de Montreal, Canadá y religioso de los Misioneros de Quebec, quién será sustituido por el hondureño Teodoro Gómez Rivera, quien desde hace dos años fungía como obispo auxiliar de Tegucigalpa.