Apatzingán, Michoacán.- Una comisión de 'alto nivel' de la Iglesia católica en México se habría reunido en días pasados con representantes de la Presidencia de la Republica para plantearle sus preocupaciones sobre el tema de violencia que persiste en Tierra Caliente.
Según informó el párroco Jorge Luis Martínez, pastor de Santiago Apóstol en Coalcomán, esta reunión tuvo por objetivo atender la situación dramática que padecen los habitantes de algunos municipios que conforman la diócesis de Apatzingán.
El sacerdote Martínez aseguró que la comisión estuvo integrada por el arzobispo de Monterrey y presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Rogelio Cabrera López; el obispo de Apatzingán, Cristóbal Ascencio García; y el obispo auxiliar secretario de la CEM, y Alfonso Miranda Guardiola.
Estos representantes de la Iglesia católica compartieron con las autoridades federales el drama de la gente en Michoacán, las cuales se comprometieron a atender "de manera directa el problema de la violencia en Coalcomán y la Tierra Caliente a través de los delegados en Michoacán del Gobierno de México".
En ese orden de ideas, el sacerdote Jorge Luis Martínez Chávez afirmó que el gobernador Silvano Aureoles lo invitó para sostener esta semana una reunión de seguridad en Apatzingán, a la que no podrá asistir por motivos parroquiales y de los cortes en la carretera, pero expresó su confianza en que se dé una solución a los problemas de Coalcomán, especialmente al de la libertad de tránsito en la carretera que los une con Tepalcatepec, donde dijo "si no hay zanjas, hay balas, porque desde hace un mes se libra una guerra sin cuartel", lamentó.