Cuernavaca, Morelos.- Durante la jornada de paz dedicada a la conversión de los criminales, el obispo de Cuernavaca y secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Ramón Castro Castro, hizo un llamado a delincuentes para 'redimirse' y renunciar a aquellos bienes o riquezas mal habidas pues "Dios los va a juzgar".
En la celebración eucarística realizada en la Catedral de Cuernavaca, el obispo Castro recordó que durante el mes de julio, la Iglesia católica organizó diferentes momentos para rezar y trabajar por la paz. De igual manera, aseguró que la Iglesia ha suplicado en su oración por la paz, un buen gobierno y la mejor política, como la ha llamado el papa Francisco en su más reciente encíclica 'Frattelli Tutti'.
La jornada del 31 de julio, la feligresía católica dedicó las celebraciones domincales a pedir por la conversión de los victimarios. En ese contexto, el obispo pidió a los criminales reflexionar sobre "todo el mal que causan y el dolor a miles de familias para tener dinero fácil" no sólo por el bien ajeno sino el personal: "Los puede matar el día de mañana".
El obispo insistió en que se pensara sobre "el dinero fácil" conseguido a través del daño provocado al prójimo y a personas inocentes: "¿De qué les sirve acumular tanta riqueza si no son ricos ante Dios? -preguntó y afirmó: "Serán juzgados porque hay justicia; Dios es justicia y los va a juzgar".
"Cuántas veces viven una horrenda soledad, sin poder estar con su familia o vivir la belleza que ofrece la vida y el amor. Siempre huyendo y solo se identifican con su riqueza, pero en el fondo esos hermanos del narcotráfico, aunque no estén en la cárcel ya son prisioneros de estos bienes y difícilmente tienen futuro", cuestionó Castro.
Finalmente, junto a la comunidad católica, el obispo elevó preces para que los victimarios "se dejen tocar por Dios" para cambiar sus actitudes y sus actividades. También, para que recuerden que ellos mismos provienen de una familia, con madre, hermanas y hermanos. (Información El Universal)