Morelia, Michoacán.- Personal de la arquidiócesis de Morelia ha reconocido que, en recientes días, el celular del arzobispo Carlos Garfias Merlos fue intervenido (hackeado) y que presuntos delincuentes han intentado estafar a fieles y a contactos del metropolitano a través del chat de WhatsApp.
Contactos cercanos al arzobispo han alertado a algunos de los grupos y a contactos directos del pastor para evitar caer en las maniobras de los extorsionadores cibernéticos que solicitan, haciéndose pasar por Garfias, recursos económicos que deben ser depositados en una cuenta bancaria.
En una de las convesaciones de la aplicación de WhatsApp, los hackes hacen parecer que el arzobispo solicita un apoyo de 28 mil pesos, los cuáles deben ser depositados a nombre de Óscar N, a la cuenta de HSBC número 655488xxxx y proporcionan incluso la clabe interbancaria: 021320065548844xxxx.
La denuncia de estos crimenes (hackeo, usurpasión de identidad, estafa) fue revelada por uno de los fieles altruistas que casi fue sorprendido por los delincuentes cibernéticos: "Claro que sí monseñor -respondió incialmente el bondadoso samaritano-. Yo lo veo con mucho gusto. Sabe que lo que usted necesite".
Como respuesta de los criminales, hacen decir al falso arzobispo: "Gracias igualmente dios te bendiga".
Según los medios locales, este problema de teléfonos celulares hackeados es una moda en Morelia y otras localidades michoacanas. Los hackers ya han afectado gobernador de la entidad, a integrantes del gabinete estatal, a diputados, líderes sociales y miles de ciudadanos que son sorprendidos por este mecanismo.
(Información Quadratín)