Ciudad de México.- El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de México, Francisco Javier Acero, alertó que las casas y albergues administrados por la Iglesia católica para apoyar a migrantes y personas en tránsito se encuentran no sólo saturadas sino que, en muchos casos, incluso rebasadas en sus capacidades.
Acero Pérez hizo un reconocimiento a las 54 casas y albergues migrantes que con mucha generosidad y esfuerzos intentan atender a los miles de migrantes que pasan por México; acotó que los centros instalados en la ciudad de México ya no tienen espacio para más gente:
"Están muy llenos. Da tristeza ver a cientos de migrantes instalados en endebles campamentos cercanos a la Central del Norte, en las vías en la Colonia Vallejo, en camellones o en las calles. Y esa situación requiere atención urgente".
En una entrevista con el diario La Prensa, el obispo expuso que la arquidiócesis comandada por el cardenal arzobispo Carlos Aguiar Retes podría abrir nuevas casas para atender a los migrantes, pero en la medida en que el Estado cumpla también con su parte para mitigar las necesidades de los migrantes:
"No es que la Iglesia esté haciendo un papel desde la filantropía, sino desde el Evangelio, nosotros en la medida que podamos ayudamos... el Estado es quien tiene que abrir las casas como la de Tláhuac y otras que hay en la ciudad y que capacite a funcionarios que los atiendan con la dignidad que todos los seres humanos debemos tener cuando venimos al mundo", dijo.
Afirmó que si bien los migrantes no buscan quedarse en México, lamentablemente "no tienen alternativas seguras para continuar su viaje hacia el norte", resaltó.
Abundó que en el tema migratorio ve las cosas muy complicadas, siguen las deportaciones masivas de Estados Unidos, "las autoridades de ese país, dan orientaciones ejecutivas, un día sí y otro no, o un día se contradice con la otra", criticó.
Acero manifestó que la Iglesia católica confía que la próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum, va a gobernar para todos los mexicanos, sin distinción de partidos ni colores.
Por ello, se pronunció porque haya diálogo con todos los sectores, con la próxima presidenta de México, y la Iglesia espera el diálogo desde la paz, todo lo que se ha construido ha sido desde las parroquias, desde los barrios, y ahora lo que se tiene se comprometió a seguir dialogando.
Asimismo, comentó que esperan que en México se restablezca la seguridad para todos los mexicanos, para los que están en las calles y también seguridad y derechos humanos para los que están en las cárceles y reclusorios.
Acero dijo que con los diálogos de paz, se pueden sacar muchos acuerdos y realmente fincar el camino de paz y conciliación.
Señaló que van a seguir dialogando para que los compromisos que ella firmó se apliquen y se cumplan: "Sí nos gustaría reunirnos pronto con Claudia Sheinbaum a través de la Comisión de Diálogos por la Paz. Se intentará ir con ella para que haya cumplimiento a su palabra", subrayó.
La próxima presidenta de México, sabe que la iglesia puede ser un buen apoyo "y lo que le pedimos es que gobierne para todos", concluyó.