Morelia, Michoacán.- El Sistema Educativo Nacional tiene frente a sí el desafío de superar las desigualdades materiales y formativas en los centros educativos del país al tiempo de encontrar los mejores mecanismos para acercar los contenidos de educación a distancia a 36 millones de escolares que el 24 de agosto próximo comenzarán clases no presenciales a través de televisión y medios digitales.
Durante el conversatorio organizado por la Dimensión de Pastoral Educativa y Cultura de la Conferencia del Episcopado Mexicano, los especialistas en educación: Reyes Tamez Guerra (exsecretario de Educación Pública) y Educardo Backhoff Escudero (extitular del Instituto Nacional de Evaluación Educativa) reflexionaron sobre los desafíos del Sistema Educativo en México ante el inacabado escenario de pandemia y emergencia sanitaria por COVID-19.
El anfitrión del encuentro, el sacerdote Eduardo Corral, preguntó a los expositores su punto de vista sobre los retos del sistema educativo ante la pandemia, incluyendo el regreso a clases para los millones de escolares; recordó que el episcopado mexicano había reiterado su llamado a la comunidad educativa (integrada por padres de familias, maestros, autoridades, maestros, alumnos y la sociedad en general) para entrar en corresponsabilidad pues "si antes de la pandemia ya se hablaba de emergencia educativa que requería un pacto educativo (convocado por el papa Francisco en septiembre del 2019) ahora es tiempo de articular dicho pacto".
Backhoff Escudero compartió un panorama de la situación del sistema educativo en México: "Somos un país joven sin embargo un país muy desigual, que concentra la riqueza en el 10% de la población y la pobreza en la gran mayoría de la sociedad mexicana. En 2016 teníamos 10 millones de personas en extrema pobreza y quizá crezcamos al doble después de esta pandemia. Se estiman entre 20 y 25 millones de personas en condición de pobreza tras esta emergencia".
Blackhoff señaló que México es un país muy disperso con cerca de 190 mil localidades, muchas rurales donde no hay servicios educativos; lamentó la situación especial para el 12% de población indígena cuyas carencias materiales son evidentes en las escuelas bilingües. Mostró su preocupación por el problema en deserción y abandono en la educación secundaria y media superior; así como la falta generalizada de infraestructura suficiente de bibliotecas, canchas, laboratorios e incluso sanitarios o medidas de salubridad en buena parte de los centros educativos. Para el experto, estas condiciones no han sido de ayuda para que en los procesos de evaluación educativa, los resultados mejoren entre los formandos principalmente en lo referente a competencias básicas de lectura, escritura y matemáticas.
En ese tenor, Tamez Guerra aseguró que "el principal problema de la educación es que se sigue privilegiando la memorización en lugar de buscar capacidad de análisis, reflexión, aprendizaje de investigación, para expresarse y defender puntos de vista".
Para el exsecretario de Educación, las actuales autoridades, maestros y padres de familia deben enfocarse en reforzar aprendizajes fundamentales: "¿Qué podemos hacer en una situación como la que enfrentamos? Y es que adicional al desafío educativo que la educción no se puede dar en las condiciones escolares ahora tendremos que echar mano de otras herramientas como la televisión y la educación a distancia".
Tamez sugirió a la comunidad educativa "concentrarse en los aprendizajes básicos como aprender a leer y a escribir con propiedad; que puedan expresar sus puntos de vista tanto de forma oral como por escrito; que dominen las operaciones básicas de importancia para la vida diaria; y finalmente, dar énfasis en la parte socioemocional por la crisis sanitaria pues, lo más importante, es la calidad humana en la formación".
Los esfuerzos de la comunidad educativa en el contexto de la pandemia, pidió, deben orientarse a formar ciudadanos "que ayuden a su familia, a comunidad… sé que es una tarea gigantesca donde se debe hacer un esfuerzo de toda la sociedad. Todos los que podamos hacer un esfuerzo a favor de la educación, que lo hagamos. Con el mayor compromiso posible".
En ese sentido, Backhoff destacó el valor propositivo de la Iglesia católica mexicana por proponer un pacto educativo en el que toda la comunidad esté involucrada y comprometida con las situaciones adversas muchas veces acalladas: "El principal desafío del Sistema Educativo mexicano es la inequidad, hay diferencias abismales entre pobres y ricos, privilegiados y no privilegiados, no sólo económicos sino educativos y por lo tanto en la posibilidad de crecimiento. La pandemia nos ha hecho revalorar ambos roles tanto el del maestro como el de los padres de familia en la función educativa de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes".
Finalmente, ambos especialistas, ante la apertura del ciclo escolar el próximo 24 de agosto a través del modelo de educación a distancia, pidieron a los padres, a los maestros y a las autoridades reconocer el largo trabajo de educación a distancia que el gobierno mexicano ha realizado desde hace décadas:
"México tiene mucha experiencia en la televisión educativa... deberíamos acudir a estos mestros con experiencia para convertir esa modalidad de educación a distancia en una buena experiencia integradora y participativa para que los escolares no sólo se conviertan en un receptor", apuntó Backhoff y Tamez lo secundó: "Afortunadamente México trabajó por muchos en el desarrollo de contenidos educativos para televisión y educación a distancia (ILSE). Cuenta con mucho material educativo para enfrentar esta situación. Éramos el segundo país con más producción de contenidos educativos, sólo Reino Unido producía más. Esa es una gran ventaja".