Niza, Francia.- En un acto de una aún inexplicable brutalidad, al menos tres personas fueron asesinadas en el interior de la catedral basílica de Nuestra Señora en Niza, durante un ataque con cuchillo. El alcalde de la ciudad costera, Cristian Estrosi, calificó los crímenes como un ataque terrorista.
El ataque con arma blanca tuvo lugar este 29 de octubre, alrededor de las 9 de la mañana, en la Basílica de Notre-Dame en el centro de Niza, en la avenida Jean-Medecin. Fuentes locales aseguran que el agresor gritó 'Alá Akbar' antes de decapitar a una mujer y degollar al sacristán del recinto quien murió instantáneamente.
Se afirma que el agresor atacó después a otra mujer; la cual, herida, logró huir para refugiarse en un bar cercano donde murió minutos después. Los testigos del bar escucharon a la mujer decir antes de morir: "Digan a mis hijos que los amo". Los agentes del orden enterados de los asesinatos ingresaron al recinto católico para arrestar al perpetrador de los crímenes.
Tras los asesinatos calificados de terrorismo, el alcalde Estrosi ordenó que todas las iglesias fueran vigiladas o cerradas, así como todos los demás lugares de culto de la ciudad. El mismo alcalde informó que mientras se medicaba al agresor, continuó gritando 'Alá es grande'.
Los obispos franceses han manisfestado cercanía con la diócesis de Niza y a su pastor. El presidente de la Conferencia Episcopal de Obispos Franceses, Éric de Moulins-Beaufort expresó a través de un tweet: "Una vez más mi oración muy especial por el pueblo diocesano de Niza y por el obispo Marceau para que sepan sostenerse en esta prueba y apoyar a los que son probados en su carne".
Los obispos franceses declararon una jornada penitencial por estos crímenes dentro de una catedral católica y pidieron a todos los recintos religiosos del país a tocar las campanas al unísono a las 3 de la tarde de este 29 de octubre. Además, convocaron que el proximo domingo, Fiesta de Todos los Santos, vivan la ceremonia con especial contricción por las muertes de esta mañanaa: "Eescucharemos al Señor cuando nos dice: Bienaventurados los pacificadores, serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados ustedes que son perseguidos por mi causa. Porque grande es su recompensa en el cielo".
Informado de los acontecimientos, el papa Francisco expresó su cercanía a las familias de los asesinados y del país francés: "Que cese la violencia" y "que el querido pueblo francés pueda reaccionar unido al mal con el bien". La Oficina de Prensa de la Santa Sede divulgó en un breve comunicado: "Es un momento de dolor, en un tiempo de confusión. El terrorismo y la violencia no pueden ser aceptados jamás".
Estos crímenes en Niza se suman al asesinato del profesor Samuel Paty, ultimado y decapitado el 16 de octubre pasado por haber estudiando junto con sus pupilos los fenómenos de caricaturas sobre el profeta Mahoma publicadas en la revista satírica Charlie Hebdo. Además, también se recordó la masacre acontecida en 2016 cuando durante las fiestas patrias, un conductor de un cambión terminó con la vida de 84 personas cuando voluntariamente aceleró a través de la multitud que asistía a las festividades públicas con ocasión de la fiesta nacional francesa en el Paseo de los Ingleses. El vehículo recorrió casi dos kilómetros durante los cuales el conductor disparó y subió el automotor a la zona peatonal en zigzag para causar el máximo número de víctimas. La estimación de los heridos se actualizó posteriormente a doscientos, cincuenta de los cuales estaban en estado muy grave. El atacante sólo se detuvo tras ser muerto de bala por los disparos de la policía. (Con información de Agencias)