San Salvador, El Salvador.- La Iglesia católica salvadoreña ya está lista para que el próximo 22 de enero se realice la celebración de la solemne Beatificación de dos sacerdotes y dos laicos católicos asesinados durante las tensiones políticas que percutieron la guerra civil centromericana entre 1980 y 1992. Se trata de los martirios de los sacerdotes Rutilio Grande, Cosme y Cosme Spessotto; así como los laicos Manuel Solórzano y Nelson Rutilio Lemus, estos últimos ultimados junto al cura.
"Está prácticamente todo preparado para la beatificación, y un detalle importante es que se ha decidido que el lugar de la beatificación sea la Plaza al Divino Salvador del Mundo", aseguró en conferencia de prensa el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar. Dicha Plaza también fue el escenario donde fue beatificado san Óscar Arnulfo Romero, obispo y mártir, patrono del episcopado local y de diversos movimientos obreros, sociales y eclesiales en latinoamérica.
Escobar explicó que, la beatificación de los cuatro mártires católicos se realizará a ls 17 horas del tiempo local el sábado 22 de enero; y este reconocimiento como mártires beatos simboliza un avance importante en el proceso de reconciliación nacional y en la fe del pueblo. El caso del asesinato del sacerdote Rutilio Grande y los laicos Manuel y Nelson, guarda un significado decisivo para el papel de diálogo y la defensa del pueblo de la Iglesia durante la guerra civil en El Salvador que en sus doce años de horrores, dejó más de 75 mil muertos
Los tres fueron acribillados por un escuadrón de la muerte que ametralló el carro en que se conducían el 12 de marzo de 1977, en una carretera hacia el poblado de El Paisnal, 38 km al norte de la capital.
Tanto el asesinato de Grande y los dos laicos, como el del italiano Spessotto, que según la Iglesia fue asesinado "por odio a la fe" el 14 de junio de 1980, cuando la guerra civil salvadoreña apenas comenzaba, están impunes.
Grande, un sacerdote jesuita, es reconocido como un amigo muy cercano del primer santo salvadoreño, Óscar Arnulfo Romero, canonizado por el papa Francisco el 14 de octubre de 2018. Romero fue asesinado el 24 de marzo de 1980 por su permanente clamor contra las injusticias y el enfrentamiento.
"Un buen número de obispos nos ha dicho que van a venir, así como algunos cardenales esperamos que también vengan y muchos sacerdotes y laicos", remarcó Escobar.
La misa de beatificación será presidida por el delegado del papa Francisco, el cardenal Gregorio Rosa Chávez, obispo auxiliar de San Salvador.
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