Huejutla, Hidalgo.- El obispo de las comunidades asentadas en la profunda sierra hidalguense, José Iraís Acosta Beltrán, declaró que debido a la pandemia de COVID-19, la Iglesia católica local ha buscado en todo momento contribuir mediante la puesta en práctica de medidas sanitarias y protocolos que resguarden el bienestar y la salud de los fieles y los habitantes de la Diócesis de Huejutla.
La Diócesis bajo su gobierno se sumó a denominado 'Frente Común contra el Coronavirus', que promueve el gobierno civil local y como pastor de los pueblos serranos hizo un llamado a la población a atender las medidas y protocolos de prevención.
Entre las decisiones que el obispo ha implementado en su región fue la solicitud a todos los ministros de culto que realicen los actos celebrativos y litúrgicos a puerta cerrada, con un mínimo de personas presentes participando y transmitir las misas por redes sociales y otros medios de comunicación masiva y popular.
Acosta Beltrán aseguró que, si bien ya ha pasado casi un año de la contingencia y la crisis sanitaria derivada por la pandemia, aún hay quienes pueden agradecer por conservar la vida y la de sus seres queridos:
"Muchas personas, por el contrario, han perdido a sus hermanos, familiares, amigos y conocidos, que ya no están con nosotros", reconoció y envío su oración por ellos y por los fieles difuntos.
Acosta Beltrán aseguró que a sus sacerdotes en la región le ha pedido "no participar ni promover actos masivos", así como a apelar a la buena voluntad de los pobladores para que cuiden su salud y eviten la propagación del coronavirus.
"Nos solidarizamos con las familias que han perdido un ser querido en el año pasado y esperamos que en este 2021 todo sea de mucha prosperidad, que tengan mucho amor y trabajo en sus familias", expresó.
El obispo llamó a los fieles católicos de la Huasteca a no perder la fe y la esperanza para que la contingencia sanitaria causada por la pandemia del virus SARS-CoV-2 termine lo más pronto posible. Recordó que la determinación de suspender las celebraciones católicas se tomó para evitar aglomeraciones, por lo que recomendó a la gente rezar en su domicilio y no exponerse a la enfermedad.
Finalmente, optó por enviar un mensaje de esperanza a la ciudadanía con el anhelo de que este 2021 "sea mejor que el anterior", pues afirmó: "Prácticamente ya aprendimos cómo prevenir la enfermedad que azota a la humanidad".