León, Guanajuato.- Entrampado en un largo conflicto entre la federación, el estado y el municipio de Guanajuato, el proyecto del nuevo Museo de las Momias (MUMO) ahora también requiere de la postura del arzobispo de León, Alfonso Cortés Contreras, respecto a la posibilidad de usufructuar mediante el turismo la exhibición de fieles católicos momificados cuyos descendientes aún se encuentran entre los habitantes de la región.
Esta semana, integrantes del movimiento Defensa Momias GTO acudieron al arzobispo de León para que en el nuevo museo de las icónicas momias de Guanajuato no se lucre con los que, en efecto, son restos mortales de fieles católicos.
El colectivo acudió a la Curia Diocesana de León junto a la regidora Paloma Robles Lacayo y representado por los maestros Martha Alicia Echeverría Mercado y Marco Vinicio Herrera.
Los integrantes de la comisión quisieron escuchar de primera voz, la opinión del arzobispo y de la Iglesia católica de León entorno al proyecto que impulsa el presidente municipal de Guanajuato, Alejandro Navarro Saldaña.
El proyecto se ha visto enfrentado a varias inquietudes de la sociedad y de la federación. De hecho, la delegada del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Olga Adriana Hernández Flores, ha declarado que no hay proyecto federal que respalde la construcción del MUMO.
Navarro se ha quejado de los requisitos que las autoridades federales le han impuesto para el proyecto, por ejemplo: la autorización de los familiares de las momias, en cuanto a si quieren que sean exhibidas o no.
"Presentaré los requisitos que pueda conseguir. Es decir: ¿Cómo voy a conseguir que me digan los familiares de las momias si quieren que sean exhibidas o no? Eso nunca lo voy a conseguir. No sabemos de quién son hijos algunos o hermanos. Es un tema muy complicado. Haremos lo que se pueda, dentro de nuestras atribuciones", dijo hace unas semanas.
Otro de los aspectos que detiene el proyecto es la ubicación misma del recinto pues aún hay diferencias entre lo que se considera Polígono del Centro Histórico y área declarada como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
El proyecto del MUMO contempla su construcción en lo que fue el patio de maniobras de la exestación del ferrocarril de Guanajuato, con 53 locales comerciales, a un costo de 107 millones de pesos, para lo cual ya se adquirió una deuda por 70 millones de pesos.