Santiago de Querétaro, Querétaro.- En el marco de la apertura del Año Jubiilar 2025, el obispo Fidencio López Plaza presidió una misa en la Catedral diocesana, en donde señaló la importancia de vivir este año de gracia como "una oportunidad para reconstruir el tejido social desde las comunidades".
El obispo de Querétaro enfocó su mensaje "a la esperanza activa y el compromiso con los más vulnerables" y pidió que los fieles católicos de la entidad sean auténticos "artesanos de esperanza".
"En tiempos adversos y difíciles, los cristianos tenemos una buena noticia: nos ha nacido el Salvador del mundo. Con él siempre nace y renace la esperanza que no defrauda", expresó.
López Plaza explicó que el Jubileo Ordinario no es solo un momento en el calendario, sino una "actitud de vida" que invita a mirar y escuchar el clamor de los pobres, los excluidos, los heridos y los descartados, respondiendo con solidaridad y acciones concretas.
Por ejemplo, recalcó la necesidad de interpretar los signos de los tiempos para generar esperanza en un contexto de la crisis antropológica y ecológica que vive el ser humano y la creación entera.
"Los tiempos de crisis son tiempos de esperanza. La crisis ecológica y la crisis antropológica que desdibuja y mutila la figura humana están pidiendo a gritos un jubileo al estilo de los jubileos bíblicos", señaló.
Recordó a los presentes las prioridades que tiene la Iglesia local de Querétaro, una ruta de tarbajo y orientaciones concretas para que todos los miembros católicos y las organizaciones en las que participen sean "sinodales", es decir que escuchen y dialoguen, especialmente en el encuentro con las generaciones de jóvenes y en el trabajo de reconciliación ante el panorama de violencia.
"Nos identificamos humildemente como artesanos de la cultura, de la reconciliación y de la paz, promoviendo desde nuestras parroquias la oración, la catequesis y los eventos por la paz", afirmó.
Finalmente, López Plaza también recordó que el Jubileo es un llamado a actuar con compromiso y valentía: "Considero que es necesario pasar del pensar-hablar y soñar al hacer. Hacer la voluntad de Dios en este jubileo".
La misa concluyó con una bendición y un exhorto a vivir el Jubileo como un tiempo para reflexionar y construir un mundo nuevo basado en los valores del Evangelio.