San Cristóbal de las Casas, Chiapas.- Ante la aparición de nuevas fosas clandestinas en la entidad del sureste mexicano, el obispo Rodrigo Aguilar Martínez expresó su preocupación por la manera en que el crimen organizado se ha inserido en la población local y por los enfrentamientos entre grupos que dejan en zozobra a la población; del mismo modo, en un nuevo llamado a la paz, hace preces por que los chiapanecos no abandonen la esperanza y la confianza en que podrán recuperar una vida tranquila.
Entrevistado en el programa radiofónico 'Aristegui en Vivo' el obispo Aguilar Martínez compartió su esperanza en el arranque de año para que las comunidades puedan recuperar la paz; lo anterior, con expectativas positivas ante los nuevos operativos por parte de la reciente administración estatal.
En días pasados, fueron encontrados 31 cuerpos en fosas clandestinas en la región y las autoridades locales reconocieron que se vive un incremento de la presencia del crimen organizado en distintas localidades de esa entidad.
Ante ese panorama, Aguilar Martínez confirmó que la violencia sigue siendo alarmante en Chiapas pero, dijo tener una renovada confianza en los operativos que han sido desplegados con fuerzas especiales por parte del nuevo gobierno estatal: .
"Se está ahora corroborando lo que ya se sabía, de hallazgos de fosas clandestinas, de cuerpos ahí sepultados… parece que hay visos de que, en los hechos, se está enfrentando el crimen organizado en los diversos grupos... que actuaban contra la población", dijo.
Las fosas clandestinas fueron halladas en Palenque y en La Concordia; el primero en la zona norte, cercano a Tabasco; y el otro, en el sur, cercano a la frontera con Guatemala:
"Es indicativo de que el crimen organizado fue entrando a todas partes entre la población, sobre todo a estos lugares".
En la entrevista, Aguilar Martínez recordó el asesinato del sacerdote indígena Marcelo Pérez Pérez, en octubre pasado; señaló que su ejecución intentó ser un "mensaje contra quienes buscan la paz en Chiapas". Sin embargo, dijo que "la sangre de los mártires es semilla de cristianos, semilla de constructores de paz".
Aguilar Martínez hizo preces para sostener la esperanza de que en las comunidades retorne la paz: "Que las familias puedan vivir ya una vida tranquila… que haya el comercio ya más tranquilo, que la vida empresarial, laboral, política vaya a su normalidad. Eso es manifestación del anhelo de paz que queremos".
En su intervención, el obispo de San Cristóbal de las Casas respaldó el llamado del nuevo gobernador de la entidad, Eduardo Ramírez, quien recientemente convocó "a la sublevación contra el crimen y a enfrentarlos con valor". Aunque el obispo también pidió a los criminales "recapacitar y a la población civil, a no tomar venganza".
"Yo me sumo invitando a los agresores, a los criminales que recapaciten, que no es de manera violenta y prepotente como se puede vivir cada día... Un llamado a los que han sufrido pérdidas humanas, que no piensen en la venganza, que perdonemos y a su vez que los que han agredido pidan perdón".
Finalmente, recalcó su esperanza en una vida pacífica y normalizada para las comunidades afectadas.
"Que las familias puedan vivir ya una vida tranquila en que salgan a trabajar, puedan comerciar, puedan enviar sus hijos a la escuela… Esta es nuestra esperanza", manifestó.