Zacatecas, Zacatecas.– En el marco del último domingo del año litúrgico, el obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, convocó a los fieles a una reflexión profunda sobre el sentido de la vida, la muerte y la esperanza cristiana, subrayando que este llamado busca responsabilidad y no alarmar.

Durante su homilía, Noriega Barceló señaló que la palabra de Dios orienta a pensar en el final de la existencia y de la historia universal. “No es para generar pánico”, aseguró el obispo, sino para fortalecer la confianza en la misericordia divina.

Explicó que la fe contempla el juicio final como una promesa de salvación sostenida en Jesucristo. “Todo pasa”, afirmó el líder católico, recordando que la vida humana es transitoria y que la única realidad eterna es Dios.

"Lla vida cristiana debe edificarse con la mirada en lo trascendente y con la certeza de que la misericordia del Señor acompaña incluso los momentos más oscuros y dolorosos", dijo.

El obispo relató encuentros con víctimas de violencia en comunidades del estado y cuestionó cómo se enfrenta el dolor. Preguntó a los fieles si permitirán ser vencidos por él o si lo ofrecerán como acto de confianza. Aseguró que “nada, ni nadie, por más doloroso o complejo que sea, te aparte del único camino de la salvación”.

Noriega Barceló definió la esperanza como firmeza para enfrentar realidades adversas. Alertó sobre falsas doctrinas que prometen soluciones inmediatas y recalcó la necesidad de vivir con discernimiento y compromiso.

"La esperanza no es pasividad, sino firmeza para enfrentar realidades adversas y no abandonar el camino de salvación", aseveró y concluyó que solo Jesús ofrece un camino real y definitivo hacia la vida eterna.