Madrid, España.- La Iglesia católica de España abrirá una investigación que profundizará en ocho décadas de su historia contemporánea sobre presuntos casos de abuso sexual de cientos de niños por parte de miembros del clero. La investigación de la Iglesia comenzará 'por oficio' luego de la investigación del diario El País y cuyos directivos enviaron directamente al papa Francisco.
El diario presentó denuncias de abuso contra 251 sacerdotes y algunos laicos de instituciones religiosas; y, aunque no ha publicado la totalidad de los hallazgos de su investigación, afirmó que el periodista entregó un expedente de 385 páginas al papa Francisco el pasado 2 de diciembre.
Por su parte, el Vaticano ha remitido a las instancias competentes este informe para que se proceda conforme a la normativa canónica vigente:
"El Santo Padre siempre ha insistido en su atención y su cercanía a las víctimas de abuso, con las palabras, la oración y con muchos gestos. La documentación entregada, ya que su naturaleza había sido ilustrada, ha sido entregada a las instancias competentes para que se pueda proceder según la normativa canónica vigente, oportunamente actualizada en los últimos años", destacó Matteo Bruni, el jefe de la oficina de prensa vaticana.
El diario español ha asegurado que el papa Francisco remitió la documentación a la Congregación para la Doctrina de la Fe, que se encarga de investigar los casos de abusos a menores en todo el mundo.
La investigación realizada por los periodistas también fue entregada al presidente de la Conferencia Episcopal Española, Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, quien informó que ha enviado al Tribunal Eclesiástico catalán la información para que comience el proceso de investigación y sanción.
Los datos adelantados por el medio de comunicación han orillado a la Iglesia española a iniciar esta investigación de actos de pederastia en sus instituciones que podrían remontarse hasta 1943.
Aunque la limitada investigación apunta a 251 sacerdotes y 31 congregaciones religiosas, el diario sitúa el número de víctimas en mil 237 personas en los últimos 80 años; el primero documentados en 1943 mientras el último se acusa habría sucedido en 2018.
Según el propio informativo, todos estos casos son inéditos (excepto trece que ya habían sido ventilados en medios de comunicación) y, por ello, se especula que el total de ministros acusados ascienda a 600, señalados como probables perpetradores de crímenes sexuales.
La CEE reaccionó a esta investigación y a la presentación de la misma a la Santa Sede; y, aunque reconoció el valor de las denuncias: "La Iglesia insiste en la importancia de denunciar los abusos y anima a todas las víctimas a presentar sus denuncias en las instituciones jurídicas, canónicas o sociales" también lamentó que el medio de comunicación se reservara con intereses mediáticos algunos de los testimonios y necesidades de víctimas para publicar una investigación en lugar de asistir integralmente a las víctimas y a las familias y añadió: "Sería deseable que las acusaciones que recoge el citado informe tuvieran mayor rigor, porque su contenido de carácter dispar hacen difícil llevar a cabo una investigación".