Ciudad del Vaticano.- El papa Francisco sostiene largas sesiones de trabajo este 28 y 29 de agosto con el pleno del Colegio Cardenalicio que se ha dado en cita en Roma para participar del Consistorio donde fueron creados 20 nuevos cardenales, se verificaron los votos para la canonización de dos beatos y se estudiará cómo impacta a la Iglesia universal la nueva Constitución apostólica 'Praedicate Evangelium' más allá de los territorios vaticanos.

Cerca de 190 cardenales provenientes de todo el mundo trabajarán este lunes y martes con el papa Francisco en la reflexión sobre la nueva constitución que rige la operatividad de los dicasterios romanos y su vinculación con la presencia de la Iglesia en todos los rincones del orbe. Es decir, sobre el futuro mismo de la Iglesia.

Francisco inició su pontificado en 2013 con un programa 'reformador' que ha puesto acento en varios ajustes administrativos y pastorales en la Curia Romana. Tras nueve años de reformas, el Papa ha condensado los cambios en una nueva Constitución que mira al futuro con un nuevo organigrama y con más apertura a laicos y mujeres en la toma de decisiones en la Iglesia.

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La nueva Constitución emanada del documento 'Praedicate Evangelium' entró en vigor el 5 de junio pasado y sustituye a la constitución 'Pastor Bonus', promulgada por Juan Pablo II en 1988. Los analistas afirman que este nuevo modelo operativo ofrece "a una dirección más misionera a la Iglesia, al tiempo de abrir la puerta a una mayor presencia de laicos y mujeres".

Expertos destacan que, el Papa ha puesto a la figura del pontífice a ras de suelo con la creación del gran dicasterio para la Evangelización, que absorbe a la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y al Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización; este gran organismo, además, será presidido directamente por el Papa reinante y se sitúa como instancia preferente ante otros organismos de histórico raigambre administrativo como la Congregación para la Doctrina de la Fe o la Congregación de los Obispos. 

Los cardenales sostendrán reuniones por grupos (se estila organizar a los cardenales por idiomas y grupos lingüísticos), los cuales estudiarán los márgenes de la Constitución apostólica, después realizarán sus aportaciones de manera sistemática. Sin embargo, algunos cardenales entrevistados por los propios medios de la Santa Sede, adelantaron que no descartan que, durante el encuentro de purpurados, se puedan atender otros temas no previsos en la agenda.

El director de la revista de la Compañía de Jesús, 'Civiltá catolica' y muy cercano al Papa, Antonio Spadaro, destacó en entrevista con una agencia de noticias española que esta reunión será importante "porque permitirá retomar y discutir la nueva Constitución de forma sinodal. Los cardenales, de hecho, vienen de todo el mundo y su servicio es ayudar al Papa en su ministerio petrino".

El propio Spadaro reconoce que este tipo de consultas al colegio cardenalicio deberían ser más frecuentes y no sólo cuando se trate de una convocatoria a Cónclave (por muerte o renuncia del pontífice): "Necesitamos, por tanto, como en las congregaciones generales antes del Cónclave, una reflexión sobre el futuro de la Iglesia, en este caso partiendo del valor y significado de la Curia Romana. Es necesario que estas formas de consulta y de discernimiento común sean más frecuentes, dada también la gran diversidad presente en el seno de la Iglesia católica hoy y la necesidad de consolidar el estar juntos, que no debe limitarse a momentos extraordinarios y excepcionales", explicó.

"Será también un momento importante de conocimiento mutuo de los miembros del Colegio cardenalicio", reconoció Spadaro; y es que, aunque el papa Francisco ha asegurado que no tiene intención de renunciar, por el momento, en esta reunión soplan aires de cónclave al ser la primera vez en la que muchos de los que elegirán al futuro pontífice se verán las caras.

En estos nueve años, Francisco ha nombrado a 83 de los actuales 132 cardenales electores -aquellos con menos de 80 años que podrán participar en el cónclave- que supone el 63 % de los que entrarán en la Capilla Sixtina para elegir al nuevo pontífice en saco de un cónclave moderadamente inminente.

El Vaticano informó que se han dado cita 197 cardenales de los 227 que forman el colegio cardenalicio; también confirmó la presencia de los patriarcas de Oriente y los superiores de la Secretaría de Estado.

La reunión concluirá el martes 30 de agosto por la tarde y el Papa celebrará con todos los cardenales una misa en la basílica de San Pedro.