Villahermosa, Tabasco.- Durante la consagración de ocho nuevos sacerdotes para la Diócesis de Tabasco, el obispo Gerardo de Jesús Rojas López los exhortó a predicar en sus nuevas misiones "con bondad, verdad y santidad".
La consagración de los diáconos en presbíteros se realizó en el Seminario Mayor en la solemnidad de San José y fue presidida por el obispo local, Rojas López, quien impuso sus manos sobre los nuevos ministros Antonio Castellanos Hernández, Crescencio Hernández Cruz, Edgar de Jesús Cruz Pérez, Aurelio Hernández Pérez, Francisco Hernández Aguilar, Iván de Jesús Sánchez May, Jesús Guadalupe Morales Ventura y Feliciano Gerónimo Cruz.
Rojas López ofreció una homilía y un breve mensaje a los neopresbíteros: "A eso han venido, a decirle a Cristo Jesús, a decirle a Dios, aquí estoy Señor, vengo para hacer tu voluntad. Por eso, los que hoy les acompañamos, hacemos nuestra oración por ustedes, por eso, junto con la Acción de Gracias, también la súplica: Señor, concédeme ser un sacerdote casto, pobre y obediente. Por eso, lo que van a predicar es la bondad, la verdad y la santidad".
Rojas López también señaló que Jesucristo "espera frutos de ellos, incluso, dar hasta la vida por el Evangelio", por ello, junto al pueblo, pidió por lo nuevos sacerdotes la gracia y la virtud.
El obispo reflexionó para los sacerdotes: "¿Cómo les ve Dios? ¿Cómo los conoce Dios? ¿Qué hay en el corazón de ustedes? ¿Qué le ofrecen al Señor? ¿Qué es lo que el Señor se ha enamorado de ese corazón que ustedes hoy le ofrecen? Por eso hoy, todo el que pide, recibe, hoy le pedimos a Jesucristo que les de la gracia y la virtud de poder conocer al padre bueno, señor de la Misericordia", indicó.
Durante el rito de la ordenación, los nuevos sacerdotes prometieron obediencia al obispo y a sus sucesores, y éste los ungió con aceite en sus manos y les entregó el Cáliz y la Patena, para que luego fueran revestidos con la vestimenta sacerdotal.
En nombre de sus compañeros de generación, Crescencio Hernández Cruz, agradeció este momento de alegría para ellos y la Iglesia Católica, y dejó un mensaje para los seminaristas que aún están en formación:
"Hoy es un gran día de alegría, hemos sido testigo de ocho nuevos presbíteros para la Iglesia que peregrina en Tabasco. Gracias a Dios por hacernos participar en el sacerdocio de su hijo Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote. A todos nuestros hermanos seminaristas, a quienes nos han acompañado durante los años, en la aventura de la vocación, les animamos y rezamos por ustedes, nunca dejen de soñar, algún día serán sacerdotes", dijo.