Monterrey, NL.- La ciudadanía y los fieles deben fortalecer la virtud de la esperanza aun cuando las medidas para combatir el coronavirus se tornen más estrictas, invitó el arzobispo de Monterrey y presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Rogelio Cabrera López.
“Los acontecimientos que estamos viviendo y que nos hacen recordar lo frágiles que somos no deben ser motivo para que perdamos la esperanza en que todo podrá ser superado aun cuando se tengan que tomar medidas más estrictas”, destacó en su mensaje dominical.
El arzobispo comprendió que, ante las medidas, algunas personas no estarán de acuerdo y manifestarán sus inquietudes; sin embargo, insistió en que dichas disposiciones son necesarias para poder retornar a las actividades cotidianas.
En ese sentido, Cabrera López invitó a los fieles católicos a ser obedientes ante las medidas pues “el creciente número de contagios es preocupante”.
En su mensaje a los medios, el arzobispo pidió fortalecer la virtud sobrenatural de la esperanza, “nos da la firme confianza en que Dios nos bendice para salir adelante… no debemos quedarnos en la lamentación”.
También adelantó que en el territorio que comprende la Arquidiócesis de Monterrey, los templos católicos permanecerán cerrados los fines de semana hasta nuevo aviso: “Es un signo de solidaridad, no de temor ni de falta de fe”, aclaró y exhortó a los miembros de la Iglesia católica a “ser los primeros en dar este testimonio”.
A sus sacerdotes, el arzobispo les recordó la posibilidad de que, entre semana, ofrezcan a los fieles más horarios y posibilidades para participar de los sacramentos; y a los fieles les indicó que su participación en las misas de entre semana serán válidas como las misas de precepto dominical mientras dure la pandemia.
Anticipó, además, que hay fieles católicos que han cuestionado estas medidas que asume como arzobispo metropolitano “están en todo su derecho, pero estas decisiones se toman en común acuerdo y en comunión con los obispos y presbíteros buscando el bien de todos”.
“La fe, la religión es esencial a la vida de los ciudadanos; pero el bien mayor de nuestra salud nos obliga a quedarnos en casa”.
Finalmente, Carbera López convocó a los católicos a participar del rezo del Rosario el próximo 11 de julio a las 13:00 horas a través de la iniciativa Rosario por el Mundo.