Ciudad de México.- Entre los pueblos originarios, lacustres y de la montaña de Xochimilco la celebración del Niñopa (Niño Dios) cada 2 de febrero, día de la Virgen de la Candelaria, es una tradición que se sumerge en la historia hasta hace más de 450 años; sin embargo, por primera vez, los pobladores debieron realizar estos festejos con protocolos de sana distancia.
Tanto las autoridades de la alcaldía como de la joven Diócesis de Xochimilico buscaron preservar las tradiciones de los ocho pueblos y barrios originarios locales abriendo la Catedral de San Bernardino de Siena para recibir a los fieles devotos del Niñopa.
Las celebraciones eucarísticas se realizaron al aire libre, bajo carpas instaladas en el atrio del templo religioso. Antes de ingresar al recinto, personal de Protección Civil y de la Diócesis de Xochimilco tomaron la temperatura y aplicaron gel antibacterial a los fieles, además de que se supervisó que todos los asistentes portaran correctamente el cubrebocas durante su estancia en el templo religioso.
Al mismo tiempo, las autoridades de la alcaldía de Xochimilco detallaron que se realizó una verificación de que las celebraciones religiosas por el día de la Candelaria en los barrios aledaños de El Rosario, San Juan, La Asunción, Tlacoapa, La Guadalupita, San Lorenzo, San Esteban y San Crucita los fieles acudieran con cubrebocas y se repetaran los protocolos de disminución del riesgo de transmisión de COVID-19.
El Niñopa es la imagen más venerada del sur de la Ciudad de México y cada 2 de febrero, el obispo local y los sacerdotes del pueblo xochimilca testifican el cambio de mayordomía, la familia local que lo recibe para que durante todo un año se encarge de presentarlo, preservarlo y acompañe en las visitas a las familias del pueblo.
Este 2021, la familia Paredes Valverde debía entregar la imagen a la siguiente familia en la lista de espera, la cual está ocupada hasta el 2046; sin embargo, debido a varias faltas a los usos y costumbres de la familia que le daría posada al Niñopa se decidió que la imagen se quedará otro año bajo el resguardo de la familia Paredes Valverde.