Segovia, España.- "Recibes una llamada, reconoces en la voz a tu obispo y entonces te pide 2 mil 200 euros". Así relatan las víctimas de un viejo modelo de fraude actualizado con herramientas de la Inteligencia Artificial (IA); desde hace unos días, sacerdotes y monjas de la Diócesis de Segovia han recibido llamadas telefónicas de un impostor que, utilizando tecnología de clonación de voz, se hace pasar por el obispo Jesús Vidal Chamorro para solicitarles dinero.

La estafa es muy vieja: a través de una llamada el obispo pide a sus contactos cercanos 2 mil 200 euros (46 mil pesos) con la excusa de poder reclamar una falsa herencia; la diferencia es que, los religiosos reconocen la voz de su pastor detrás del auricular porque está siendo clonada en tiempo real por los impostores.

Los objetivos de los estafadores son sus primeros conocidos y más cercanos colaboradores. Según han informado medios locales de Segovia, los maleantes contactaron a distintas víctimas identificándose como "Don Jesús, el obispo de Segovia" y argumentando la necesidad de realizar un ingreso urgente de 2 mil 200 euros para desbloquear una supuesta herencia de 40 mil euros destinada a la diócesis.

El fraude, dicen las fuentes, se realizó durante la madrugada, cuando los sacerdotes comenzaron a recibir llamadas con una voz prácticamente indistinguible de la del obispo.

Entre los afectados, el sacerdote Julio Alonso, párroco de la iglesia de Santo Tomás, explicó que "la voz del impostor transmitía tranquilidad y cercanía, lo que inicialmente generó confianza".

Sin embargo, el horario inusual y la insistencia en la solicitud económica despertaron sospechas. Tras recibir varias llamadas en las que el supuesto obispo intentaba convencerle, Alonso le informó de que iba a alertar a la Policía, lo que provocó que el estafador dejara de insistir.

"El intento de fraude no se limitó a un solo sacerdote. Otros cuatro o cinco religiosos y una comunidad de religiosas también fueron contactados con la misma treta", declaran los medios.

Hasta el momento se cree que ninguno de los religiosos o religiosas contactados por el falso obispo cayó en la estafa; sin embargo, aúno se llega a profundidad en las investigaciones. Por lo pronto, la diócesis ha llamado a la prudencia y a estsar vigilantes a sus fieles y colaboradores.