Roma, Italia.- Por primera vez tras doce días de hospitalización del papa Francisco, el Vaticano reporta buenas noticias respecto a la salud del pontífice. En el último parte médico del miércoles 26 de febrero se condensan los signos positivos del estado clínico del Santo Padre.
Aunque se mantiene la cautela en la información, la Santa Sede ha comunicado primero que el Papa pasa las noches en calma, sin crisis respiratorias y descansando; también que no está postrado sino que se sienta en un sillón donde, además de recuperarse, también continúa su trabajo.
Sin embargo, la noticia más alentadora desde el hospital Gemelli ha sido que la "insuficiencia renal leve que se había detectado en los últimos días ha remitido" y que los análisis realizados tras la tomografía practicada al pontífice el martes por la tarde evidencia que el estado de la neumonía bilateral "ha mostrado una evolución normal del cuadro de inflamación pulmonar".
Los médicos no han retirado la condición clínica compleja del estado de salud del pontífice pero a través de los comunicados se evidencia una notable "mejoría" del papa Francisco; de hecho, el reporte médico ya no utiliza en su comunicado el término "estado crítico" como lo había hecho en los reportes de los últimos cinco días.
Aunque los valores de los análisis médicos y el comportamiento clínico son positivos y literalmente hablan de una "ligera mejoría", los especialistas mantienen el "pronóstico reservado".
"Los análisis bioquímicos y hemocitométricos de hoy han confirmado la mejoría de ayer", añade el parte médico, que señala que Francisco "continúa con la oxigenoterapia a altos flujos; tampoco hoy ha presentado crisis respiratorias asmáticas". Además del tratamiento médico, "continúa la fisioterapia respiratoria".
"Aunque se registra una ligera mejoría, el pronóstico sigue siendo reservado", culmina, con cautela, el comunicado, que añade que "durante la mañana, el Santo Padre recibió la Eucaristía. La tarde se dedicó a las actividades laborales".