Nuevo Laredo, Tamaulipas.- La Iglesia católica de Nuevo Laredo aseguró que se encuentra "gratamente sorprendida" por el nombramiento de Luis Carlos Lerma Martínez, originario del clero de Chihuahua, como nuevo obispo para la diócesis fronteriza y anunció que ha iniciado los preparativos para la recepción de su nuevo pastor pues, de manera histórica, se realizará la primera consagración episcopal en la diócesis neolaredense.
251007-CEM-Nombramiento del obispo de Nuevo Laredo
Tras el nombramiento de quien será el IV Obispo titular y residencial de Nuevo Laredo, el sacerdote Jesús Alberto Tijerina, vicario general de Nuevo Laredo, compartió: "Como católicos valoramos la presencia de un pastor... y más en este tiempo de que carecimos un pastor propio ahora estamos muy felices de recibirlo. En la historia de la diócesis este ha sido el periodo más largo en que no hemos contado con un obispo titular".
El vicario general confirmó que sostuvo una llamada con el obispo electo Lerma Martínez y transmitió en su nombre un mensaje que el nuevo pastor envía a su diócesis: "Desde que el Nuncio apostólico lo llamó para invitarlo de parte del Papa para ser obispo de Nuevo Laredo, se ha puesto a orar por todas las religiosas, los sacerdotes y laicos de esta Iglesia y que se siente contento y emocionado, que viene con alegría y con espíritu de obediencia. Él se ha esforzado por ser obediente a sus obispos en todas las encomiendas que ha ido realizando y ahora mira con fe esta llamada de parte de Dios a través del Papa para esta misión ahora de pastorear una Iglesia".
Tijerina estima que la diócesis se prepare los próximos tres meses para preparar la recepción de su nuevo obispo y prevé que en enero del 2026 se puedan tener todos los ritos que involucra no sólo la llegada de un obispo sino la histórica consagración episcopal de un sacerdote en el territorio de Nuevo Laredo:
"Don Luis Carlos aún no es consagrado obispo; por eso es un acontecimiento histórico para la diócesis, porque todos los pastores previos llegaron a Nuevo Laredo ya como obispos. Él va a llegar como sacerdote y, el día de su llegada a la diócesis, va a ser consagrado obispo. Es una celebración y un rito especial que nunca hemos vivido en esta diócesis".
El vicario general adelantó la invitación a todas las personas de los municipios en Tamaulipas y Nuevo León que conforman la diócesis a participar de esta experiencia, y especialmente a los fieles católicos les pidió participar de este acontecimiento que marca historia pues "nos emociona que él inicie su ministerio episcopal en nuestra diócesis".
La Iglesia local también adelantó que para los ritos de la llegada del nuevo obispo se espera contar con la presencia del nuncio apostólico en México, Joseph Spiteri, así como por diversos representantes del episcopado mexicano, en especial del arzobispo de Monterrey -quien aún funge como administrador apostólico-, Rogelio Cabrera López y hermanos obispos de Chihuahua, de donde es oriundo Luis Carlos Lerma.
El sacerdote Jesús Tijerina hizo un público agradecimiento justamente al arzobispo Rogelio Cabrera quien, "sigue siendo nuestro administrador apostólico hasta que llegue el nuevo obispo. Además tenemos ya algunos compromisos fijados como el aniversario 36 de la diócesis en noviembre y que serán presididos también por el administrador en funciones".
Para organizar todo lo referente a la llegada, consagración e inicio de ministerio episcopal de Lerma Martínez, los sacerdotes miembros del colegio de consultores ya organizaron una visita personal con el obispo electo: "No sólo para organizar pormenores de esa celebración sino para llevarle informes de la diócesis", adelantó el vicario general.
A pregunta expresa sobre los espacios públicos y eclesiásticos que se requerirán para las ceremonias, los sacerdotes de Nuevo Laredo consideran que uno de estos lugares será la catedral diocesana pero que analizarán con otras instancias la posibilidad de realizar la ceremonia de consagración y misa de inicio de ministerio episcopal en un sitio amplio, de acceso sencillo para muchas personas y digno para los ritos: "No tenemos en nuestra ciudad grandes espacios pero haremos lo posible para acercar a la gente de la región este acontecimiento", comentaron.
Finalmente, el sacerdote Jesús Tijerina sintetizó que, como vicario general de la diócesis, ha sido difícil no contar con un obispo residencial y titular expresamente enfocado en acompañar de tiempo completo a la Iglesia local; sin embargo también hizo un reconocimiento a todos los miembros de la comunidad (laicos, religiosas, sacerdotes) por hacer que la diócesis no parara:
"Sí ha sido difícil no tener obispo titular porque creemos que son ellos quienes conducen a la Iglesia; nosotros, los sacerdote, somos colaboradores de los obispos; pero ellos son los que llevan la pauta de nuestro caminar. Así que sí, resentimos la ausencia de no tener un obispo titular, pero esta dificultad fue atendida con generosidad y auxilio por el arzobispo Rogelio Cabrera. Además si la Iglesia no paró en sus actividades, su asistencia, los retiros, el Jubileo de la Esperanza, se debe a sus comunidades. Esto habla de la madurez de la Iglesia local. Fue difícil pero con la cercanía de don Rogelio y con la madurez y responsabilidad de todos quienes formamos la Iglesia de Nuevo Laredo pudimos seguir sirviendo durante estos años de ausencia de obispo titular".