Sídney, Australia.- Anthony Fisher, Arzobispo de Sídney, declaró esta semana que la recuperación "aparentemente milagrosa" de un niño estadounidense que sobrevivió 52 minutos sin respirar podría atribuirse a la intercesión del fallecido cardenal George Pell, figura clave de la Iglesia Católica australiana fallecida en 2023. Las declaraciones se dieron durante el lanzamiento de una biografía sobre Pell en el Campion College, cerca de Parramatta (Australia), el 26 de marzo.
Según relató Fisher, el menor de 18 meses, identificado como Vincent, cayó en una piscina en Phoenix (Arizona, EU) y fue declarado clínicamente sin respiración durante casi una hora. Tras 10 días hospitalizado y retirado del soporte vital, el niño fue dado de alta sin daños cerebrales, pulmonares o cardíacos, un hecho que los médicos calificaron como "milagroso". "Sus padres rezaron por la intercesión del Cardenal Pell", afirmó el arzobispo, subrayando que el caso podría ser clave para avanzar en la causa de beatificación del purpurado.
De acuerdo con The Australian, el tío de Vincent —un sacerdote católico— contactó durante la hospitalización al sacerdote Joseph Hamilton, exsecretario de Pell en Roma, para solicitar oraciones. Hamilton confirmó que la familia conoció al cardenal durante su visita a Phoenix en diciembre de 2021, cuando promocionó su Diario en prisión, escrito durante los 13 meses que estuvo encarcelado por cargos de abuso sexual infantil, posteriormente anulados por el Tribunal Supremo de Australia en 2020.
Pell, quien también celebró una "Misa Blanca" para trabajadores de la salud en Phoenix durante esa visita, falleció el 10 de enero de 2023 en Roma a los 81 años, tras complicaciones en una cirugía de cadera.
La Iglesia Católica requiere al menos cinco años tras la muerte de una persona para iniciar su causa de beatificación, seguida de un milagro certificado. Estos hechos son analizados por paneles médicos y teológicos para descartar explicaciones científicas. Si se comprueba que la recuperación de Vincent carece de causas naturales, el caso podría ser el primer paso para declarar a Pell "beato", etapa previa a la canonización.
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Sin embargo, expertos señalan que el proceso enfrenta desafíos, incluido el legado polarizador de Pell, quien lideró reformas financieras en el Vaticano pero enfrentó críticas por su manejo de casos de abuso en Australia. La Arquidiócesis de Sídney no ha confirmado si presentará formalmente el caso a la Santa Sede.
Mientras algunos sectores australianos celebran la noticia como un "signo de justicia divina" para Pell, grupos de víctimas de abuso han expresado escepticismo, recordando los traumas históricos de la Iglesia. El Vaticano, por ahora, no se ha pronunciado.
El sacerdote Hamilton insistió en que "la familia solo busca agradecer a Dios" y no desea especular sobre implicaciones eclesiales. Por su parte, Fisher enfatizó que cualquier decisión dependerá de "rigurosos análisis, no de declaraciones públicas".
Nota contextual: George Pell (1941-2023) fue arzobispo de Sídney entre 2001 y 2014; además fue prefecto de Economía del Vaticano con el papa Francisco entre 2014 y 2019, formó parte del consejo cardenalicio más próximo al Santo Padre. Por el proceso legal en su contra y su condena por abuso sexual —revocada en 2020— se separó del cargo y realizó las diligencias necesarias, y pasó un año y un mes en prisión antes de su absolución.
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